Dios es mucho mejor que mi paraguas favorito

“Jehová de los ejércitos está con nosotros;
Nuestro refugio es el Dios de Jacob”. Salmos 46:7

¿Alguna vez has perdido un paraguas? Yo sí. Soy del tipo de chicas que constantemente deja los paraguas en alguna parte. Los míos, los ajenos, el que sea, casi siempre se me pierden.

La mayoría de las veces  los pierdo para siempre, pero algo me ocurre con mi paraguas favorito, un ENORME paraguas azul con letras blancas impresas que tiene la capacidad de cubrirme del sol o mantenerme seca durante las más pesadas lluvias. Lo he dejado en el salón de belleza, en el gimnasio, el internet café, y ya no recuerdo en que otros lugares, incluso lo he perdido durante varios días y que creen???  Sí, siempre lo recupero. No sé si nadie se lo lleva por lo grande que es o sencillamente debió regresar conmigo todas esas veces para poder sacar esta reflexión que les comparto y comprender que Dios es mucho mejor que mi paraguas favorito.

Mi Dios es mi refugio seguro en medio de las temporadas más difíciles de la vida. Me cobija cuando la tristeza se asoma y lágrimas cubren mi rostro, me cubre cuando  los compromisos me sofocan recordándome que es mi reposo.  Su sombra me arropa cuando me falta todo, pero a la vez entiendo que  Dios es mi mundo, todo lo que necesito. No encontraría un lugar más seguro que bajo mi Dios. Y lo mejor es que no se me pierde por largos días, está disponible siempre, tampoco se dobla si los vientos  huracanados soplan.  Él es mejor que mi paraguas favorito.

Si te sientes desprotegido y expuesto recuerda esto: "El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente" (Salmo 91:1).

El Señor te ama y yo también.

Yordanka Arrocha