Dios les continúe bendiciendo, amado Remanente. Éste es su hermano y amigo Jhoel Amir. A continuación, la palabra de Dios, para este día.
Isaías 17:37 NTV
¡El mismo Señor que me rescató de las garras del león y del oso me rescatará de este filisteo! Así que Saúl por fin accedió: —Está bien, adelante. ¡Y que el Señor esté contigo!
Las probabilidades no estaban a favor de David cuando salió a enfrentar a Goliat. David era un joven pastor con nada más que la ropa en la espalda y una honda. Por otro lado, Goliat era un gigante vestido con una pesada armadura con tanta experiencia en el campo de batalla.
Como si eso no fuera suficientemente malo, David no tuvo el apoyo del ejército de Israel detrás de él. De hecho, todo el mundo - incluyendo el rey y sus hermanos - le restó importancia, lo desalentó, y sin rodeos le dijo que "es imposible!" En lugar de dejarse sentir desalentado, David decidió buscar en las últimas victorias que Dios le había dado. Su profunda relación con Dios le dio la revelación de que Dios no sólo está ahí para él. Estaba seguro de que Dios es mucho más grande, mucho más fuerte y mucho más potente que un centenar de Goliat. Por eso, David sabía que con la ayuda de Dios, él sería capaz de derrotar a Goliat.
Frente a una situación difícil puedes llegar a pensar que estas sólo. Pero la verdad es que nunca lo estás. Tú tienes al Dios Todopoderoso a tu lado! AUNQUE LAS PROBABILIDADES NO ESTÉN DE TÚ LADO TENGAS TODO EN TÚ CONTRA, DIOS ESTÁ CONTIGO!!! Él es mayor que cualquier problema o reto que enfrentar, en estos momentos. ÉL PUEDE HACER POSIBLE LO IMPOSIBLE. La próxima vez que te sientes como si estuvieras frente a un gigante, como David. Mira hacia atrás y RECUERDA cómo Dios te ha dado victorias, en el pasado. Pon tu confianza en Él, y tu confianza en lo que Él es. Dios una vez más estará contigo en la batalla y te llevará a la victoria.